A tu lado

Porque a veces la vida no es justa, y te arrebata demasiado pronto lo que mas quieres. Pero porque aún llevamos dentro a esas personitas, seamos en su nombre y en el nuestro propio las personas de las que ellos siempre hubieran estado orgullosos.

******************************************

Al transcurrir los años….

Te das cuenta de lo que realmente importa en la vida

De quienes importan, por que siempre están y han estado ahí. Aunque a veces no te des cuenta de ello ni les valores lo que se merecen empeñado, muchas veces de forma dolorosa, en conquistar corazones ajenos y distantes, que prometen grandes alegrías, pero que irremediablemente y por mucho que desees nunca acabarán estando junto a ti.

De que todos somos frágiles, y cometemos errores, por que somos humanos, pero que no podemos guardar rencor por mucho tiempo, y debemos aprender a perdonar, porque a veces la vida es injusta, y la gente que mas queremos se marcha de repente sin haberte dado tiempo a decirles todo lo que les querías, lo importantes que eran para ti, a darles las gracias o simplemente a pedirles perdón por algo que ya ni siquiera te molestaba y que seguias guardando por orgullo.

Te das cuenta de que a veces lo que estabas buscando, estuvo siempre delante de ti pero siempre te costó verlo o incluso aceptarlo. Y que las distancias fisicas no hacen que el amor desaparezca, si no mas bién es la distancia emocional, la pereza, la comodidad de dejar las cosas como están, la que enfría el cariño, porque hay que pensar que el amor y la amistad son como una planta, a la que hay que regar y mimar para que crezca con mas fuerza cada día.

Te das cuenta de que has dejado de oir el canto de los grillos, de notar el olor a humedo de la hierba, el salitre del mar, el color del verano, la alegría de las golondrinas…. Porque ahora pones mas atención en ir y volver buscando respuestas y soluciones estúpidas a preguntas y problemas que ni siquiera debiste hacerte, porque a veces los has generado únicamente en tu imaginación.

Que has dejado de ser un niño, para convertirte en una maquina productiva generadora de estrés y mal humor. Que el ruido de la sociedad, de la polución y de tu propia cabeza son tan fuertes, que por instantes te olvidas de escuchar los latidos de tu propio corazón.

Aprendamos pues a pasar mas tiempo con los nuestros, a agradecerles y demostrarles mas a menudo nuestro cariño, pero sobre todo aprendamos a mirar las cosas con los ojos del corazón, en lugar de mirarlas a través del cristal con el que la sociedad, el estrés y el orgullo propio nos están acostumbrando a utilizar.

 Cydya

******************************************